Esta investigación la escribí porque ser ladina en Guatemala y el mundo se ha resumido, equivocadamente, en un “no ser indígena”. Exploré de dónde viene la historia ladina y qué papel ha jugado en nuestras vidas y si existe alguna relación entre los aprendizajes de la sexualidad y el racismo. Hoy, habiendo terminado la investigación que me tomó 8 años, necesito recaudar 30,000 quetzáles para la impresión y publicación de mil ejemplares. Considero que la disponibilidad en libro impreso para estudio es indispensable para que descubramos cómo funciona el racismo, pero no solo desde cómo lo sufren “otras/otros” en sus cuerpos sino en el caso de las/los ladin@s cómo hemos aprendido a reproducirlo y ni cuenta nos dimos porque lo hemos considerado normal. El libro abrirá un espacio para el debate, reflexiones e intercambios que partan de cuestionar el papel jugado por quienes se nombran ladin@s y/o mestiz@s sin problematizar lo que significa. Proponemos un posicionamiento político de ruptura que permita tomar conciencia del papel que hemos jugado en la reproducción racista que reproduce el sistema. Mi agradecimiento a todas las personas que me apoyen con su donación será expresado en el libro; sepan que su aporte es parte de la liberación emocional y racional que el contenido de este libro traerá a quienes lo estudien. Atentamente, Yolanda Aguilar Urizar, Autora.